V Domingo De Pascua
Por: Cecilia Pérez Nadal. Vita et Pax. Valencia
Textos Litúrgicos:
Hch 6,1-7
Sal 32
1Pe 2,4-9
Jn 14,1-12
“Él, Nos Prepara Un Lugar”
Caminamos a buen paso ya por este mayo florido, por este tiempo luminoso de la Pascua donde los textos de la Palabra son joyas que enriquecen nuestro espíritu y fortalecen la adhesión, el amor y la esperanza en el resucitado al cual, precisamente hoy, le oiremos decirnos que “va a prepararnos un lugar”.
Ahí radica nuestra esperanza en ese futuro luminoso, el de las muchas moradas, en la Casa del Padre, en Nuestra Casa.
¿Y por dónde caminar? Hay varias pistas y todas ellas nos muestran a Jesús, todas nos conducen a él.
Primera pista: “Yo soy el camino, la verdad y la vida, nadie va al Padre sino por mí”. Esto lo dice Él mismo y me lo creo como único camino, única verdad y única vida.
Segunda pista: Jesús, piedra angular, base de una construcción diferente y duradera por encima del tiempo, en la que todos podemos participar como piedras vivas copartícipes de ese linaje elegido. Porque somos Hijos.
Tercera pista: La Palabra de Dios, eje de la predicación e impulsora y motivadora del servicio fraterno. Predicación y diaconado, verbo y servicio.
Al final de esta liturgia de la Palabra, Juan nos ofrece este pasaje donde el Señor se nos presenta como germen y signo de nuestra fe y nuestra esperanza.
Porque nos quiere y somos suyas, suyos, escuchamos que nos dice a cada cual “cuando vaya y te prepare un lugar, volveré y te llevaré conmigo”.
¿Puede haber mejor promesa? Es Él mismo quien nos quiere a su lado, quien nos quiere con Él en la casa del Padre. Cristo identificado con el Padre, nosotros viviendo con Cristo desde esa buscada identificación que nos haga capaces de Ser y de Actuar con Él y como Él.
Me queda una pequeña inquietud ante la respuesta con interrogante que dirige al bueno de Felipe “hace tanto que estoy con vosotros ¿y no me conoces?”
¿Te conocemos, te conozco, Señor? Esto me lleva a reflexión y a súplica.
Seguimos deseándonos ¡¡Feliz Pascua!!