Para los miembros del Instituto, de manera especial, Jesucristo es la Vida y la Paz. Vida que brota del seno del Padre y Paz obtenida por la sangre de la cruz. Vivir de su Vida e irradiarla, y convertirse en artífices de la Paz, ha de ser objetivo principal de sus existencias que deben converger y recapitularse en El con todas sus cosas. Art, 6