Domingo XII del TO.
Por: Luis López. Presbítero. Alicante
Textos Litúrgicos:
Jer 20, 10-13
Sal 68
Rm 5, 12-15
Mt 10, 26-33
“Necesitamos la fé en Jesús”
La Palabra nos presenta hoy una de las preocupaciones de Jesus: liberarnos del miedo: “No tengais miedo a los hombres“. El mundo no es un lugar de paz y tranquilidad, lo hemos convertido en un lugar de lucha y enfrentamiento. Cuando no estamos seguros y firmes en la fe, el miedo se apodera de nosotros. Necesitamos la fe en Jesus y, con Él sentir la cercanía de Dios. Valemos más que los pájaros del cuelo y que las flores del campo. Nuestra vida es valiosa para Él.
Por eso Jesús contagiaba esa confianza en Dios. Al enfermo le decía: “ten fe, Dios no se ha olvidado de ti”. O cuando curaba: “Vete en paz, tu fe te ha curado”. Jesus contagiaba paz cuando hablabla y consolaba a los más pobres y marginados: “Nadie nos ha hablado como Él” En él estaba el amor del Padre, y ese amor da confianza y vence el miedo.
Una doble mirada nos pide el mensaje de Jesus:
Con Jesús siempre hay que tener presente que su mirar es distinto a nuestro, más que distinto, más completo. No se conforma con una mirada al mundo sino que siempre tien en cuenta la mirada al Padre.
La primera es la mirada al mundo, para conocerlo y no tenerle piedo. Tendremos dificultades, pero Jesus, al que debemos vivir unidas, ha vencido el mal del mundo y sigue en nosotros, por su Espíritu.
La segunda mirada, que no debemos olvidar, es la confianza en Dios. Jesus nos ha enseñado a confiar en el padre. La fuerza de nuestra fe no está en nuestro poder y fuerza humana sino que se apoya en él. Él es nuestra fortaleza. Por eso debemos poner nuestras confianza en Él.